27 de octubre de 2009


Hoy es uno de esos dias en los que cabe bien decir que "espero y desespero". No importa lo que espero, el hecho es que cuando desespero pienso, busco respuestas, desmenuzo razones y caigo en un autismo que intenta ser reflexión. No es nada muy profundo ni sublime, ni siquiera es consciente.
Va a sonar estúpido pero bueno, allá vamos: tengo toda una cuestión con la huida. Creo que los seres humanos siempre estamos huyendo de algo. No creo que nos enamoremos porque se siente lindo, no trabajamos solo porque queremos vacaciones en el mar, siempre estamos huyendo, siempre estamos tratando de evitar lo inevitable: la muerte, la tristeza.
Hoy pensaba en que hay atrás de todo esto ¿a que se debe que hagamos J si queremos H?¿qué fuerzas juegan en nuestras decisiones?¿somos lo que hacemos o somos en circunstancia?

Dudamos entre el deseo y el temor: entre el deseo eterno que somos y el terror que nos da el azar, la contingencia, la inseguridad del futuro. Creo firmemente que nada está dictaminado previamente, que la clave está  en dónde ponemos el acento, a cual de las dos respondemos; básicamente ¿Hacemos lo que queremos o solo aquello que el miedo nos permite?


Vos ¿por cúal te estás dejando llevar? Si es lo que querés, lo acepto (auqnue no me guste, puedo con eso), pero espero, realmente desearia, que no sea por miedo, porque ahí ya no queda nada para hacer.

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