16 de febrero de 2011

jealous (y vuelvo..)

Una amiga, sabia y experimentada ella, me decia:"nos reinventamos cada vez".
Yo, que respondí a los celos ajenos con un melodioso "vos entendés que yo quiero estar con vos? que no me interesa si viene Ryan Goslin jurando amor y diversión sin fin"... hoy leo y pienso en lo poco que entendí los planteos de otrora.
Muchas veces esos celos que molestan y generan más de una carcajada (de ternura) tienen que ver no con las decisiones que una toma sino con lo que los demás pueden hacer/decir. Se vinculan más con los "y si..." que con los hechos concretos; más con los otros y sus acciones imaginadas que con una y sus actos reales.
Será que la distancia potencia la imaginación o que esta vez el seguro es el fotógrafo, pero hoy me reinvento en ésta que siente celos y ríe cuando toma consciencia de ellos. En esta noche disfruto la sorpresa -un tanto incomoda- de sentir algún que otro celito tenue y saber que son infundados :)

10 de febrero de 2011

Lluvia y Benedetti...

Mientras pasa la estrella fugaz
acopio en este deseo instantáneo
montones de deseos hondos y prioritarios
por ejemplo que el dolor no me apague la rabia
que la alegría no desarme mi amor... (...)
que cuando enfrentemos el implacable espejo
no maldigamos ni nos maldigamos
que los justos avancen
aunque estén imperfectos y heridos (...)
que cuando el corazón se salga del pecho
pueda encontrar el camino de regreso
que la muerte pierda su asquerosa
y brutal puntualidad
pero si llega puntual no nos agarre
muertos de vergüenza
que el aire vuelva a ser respirable y de todos
y que vos muchachita sigas alegre y dolorida
poniendo en tus ojos el alma
y tu mano en mi mano
y nada más
porque el cielo ya está de nuevo torvo
y sin estrellas
con helicóptero y sin dios

(Fer, Fer Fer)

9 de febrero de 2011

De profesión: boluda!

A veces una aprende, y a veces no.  Yo soy de las que no aprendo, de las que lo piensan, lo repiensan y siguen confiando. Si la primera mandarina estaba fea, como la segunda pensando en que no fue más que una mala elección frutal.
Las Sociedades de trabajo siempre terminan mal, siempre hay seres trepadores y siempre hay estúpidos que creen. Confio en que la consciencia tiene buena memoria y es una concubina dificil.
En suma, tenia una Pyme con unas amigas y, de una forma para nada sutil y que demuestra las escencias, me estafaron.
Ayer: rabia, bronca, ganas de llorar, sorpresa. Hoy: ya fue, prefiero menos billetes en mi bolsillo pero más paz en mi vida. Terminé ganando, gente así es preferible tenerla a un océano de distancia, ¿no creen?

7 de febrero de 2011

Que lejos quedan los viernes cuando recién es lunes no?