19 de enero de 2011

celos

Celos.

En algún retorcido lugar son deseables, son muestras de que te quiero.
En este tiempo y en este espacio son una tortura sin razón.
Viste cuando te pasa algo que no esperás? viste cuando, de repente, te das cuenta de que los anteojos los tenias en la mano?de que estás caminando y cuando caés en cuenta, es a tu casa? bueno... de repente caigo en que el caballero que fotografía la vida ya conoció a mi familia, a mis amigos, que comí un asado con su hermana y amigas, que la madre me dijo que "vaya cuando quiera", que el padre me invitó a visitarlo cuando vuelva de su viaje, que sus vacaciones empezaron conmigo y que no tiene miedo ni reparos en decirme que me quiere, que me extraña y que quiere quedarse abrazado.
Parece que... estoy en una relación señoras y señores!!
Y, dada la cantidad de parentela que hemos conocido, es en serio.

Y saben qué? lo estoy disfrutando! me gusta, lo quiero y lo vivo.
Me voy a preparar las valijas para irme al mar con él. Dos días en un hotel con ventanas que de aquel lado dan al mar  y de éste, al fotógrafo. Qué más puedo pedir?


(que traiga la valija llena de chocolate y una pócima para parar el tiempo!jajaj)