31 de mayo de 2011

Busco las palabras precisas, no quiero gritar; quiero palabras suaves que te digan, que te muestren, que te quiero. Quiero que sientas la profundidad de este deseo que me lleva a vos, que sientas la felicidad de acostarme y escucharte respirar.
Entiendo tus miedos y pesadillas, es lógico y lo entiendo, pero me niego a que un poco de pasado tire por tierra todo... no voy a justificar nada, todos tenemos muertos en el ropero de todas formas, pero necesito que hagamos un pacto.
No me gusta jugar a las pulseadas con todas las cosas que se me ocurren cuando no te encuentro, no me reconozco llamando 20 veces a tu celular y desesperandome, no me voy a acostumbrar a leer que estás triste y sentirme culpable.
Te propongo lo siguiente: asumamos nuestras culpas y fracasos, presentemos nuestros fantasmas y démosles una vida sábatica, sacudámonos los miedos del cuerpo y la mente y dejemoslos listos  para amarnos intensamente, para confiar y creer, para aprender y conocernos.
¿trato?

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